En este espectáculo sin texto dos naves interestelares circulan por las calles sorprendiendo a los viandantes. Se produce un choque y en plena discusión se descubre que uno de los astronautas es un simio. Una visión re-evolucionaria en clave de humor de la carrera espacial que pondrá en duda las teorías de Darwin. Será difícil saber quién es la evolución de quién… Una comedia espacial en la que el público se convierte en cómplice de estos ingenuos viajeros del espacio-tiempo.
Un alocado encuentro galáctico de individuos diferentes.
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